domingo, 25 de abril de 2010

Ey teacher!



Volvía a casa... solo, único, inimitable. Un paso, otro, otro más. Uno, dos, tres. Automático.
El único ruido, mis zapatos que hacían de metrónomo marcándome un ritmo del que no podía escapar.
Un tropezón afortunado quebró toda esa estructura. ¿Libre al fin? Una sensación de euforia recorrió mi cuerpo y eché a correr. El corazón se aceleraba, el sudor me recorría la frente, jadeaba. El viento corría ahora en mi favor, empujándome la espalda.

-Quieto... Basta... ¡PARA!
-¡NO!

¿Qué somos? ¿Soy único? ¿O solo soy un ladrillo más en el muro?
Nos fabrican. Cada vez somos menos personas y más autómatas. Vivimos en una sociedad que nos moldea, que nos inyecta prejuicios, que nos roba humanidad.
¿Por qué hay pensamientos que son reprimidos? ¿Qué hay de malo en ser diferente? Ser diferentes es lo que nos caracteriza. Somos la única especie con capacidad de raciocinio que nosotros conozcamos. Estamos quizá solos en una vasta inmensidad  llamada universo. Solo nosotros somos únicos. Cada uno de nosotros esta solo en ese camino. El camino de darte sentido. No hay un solo sentido, cada cual buscará el suyo propio. Pero nos tienen que dejar.
Dejadnos ser libres. No nos dirijáis a un sentido prefabricado. Cada uno se tiene que encontrar.

-Hey! Teachers! Leave them kids alone!

Canción recomendada: Pink Floyd - The Wall





Película "The Wall"



Fdo. Paulus Magister

2 comentarios:

Malena dijo...

Q gran verdad, mi querido traste!
Cuántas veces habrá quien se mire en el espejo, y vea el rostro de
un extraño.., pq nunca se permitió
conocer a quien de verdad habitaba
en su interior.., preocupado de
seguir la corriente, sin más..!

Post para reflexionar!

Bss,

Male.

Anónimo dijo...

No pierdas nunca esa sensibilidad que tienes, para expresar tanto sentimiento. Queda muy poca gente que tenga ese apego con sus mayores.Un bss y mucho animo. Vangeli.