lunes, 29 de diciembre de 2014

Yerra



¡Yerra! ¡Yerra y muere!
¡Yerra! Que es ahí donde te duele.
Que no hay perfectos pretéritos que cuelen,
como suelen, las mentiras funestas que ya huelen.

Muelen sesos en la rotativa incansable.
¡Qué sean solo verdades todas aquellas voces que se hablen!
Que no haya fallo ni enmienda, que es cosa en balde,
pero más vale tarde, que nunca ver la llama que allí arde.

Puede que haya pena, dolor, o frustración,
mas nunca vergüenza; que todos erramos
por afición, falta de atención o de cabeza.

Y no es el fallo de esta componenda el quicio,
sino de todos los demás, divino el juicio.
Entes ulteriores de suprema sapiencia
que todo lo basan y sustentan en la ciencia
de la razón de peso, y entre fallo y fallo yo,
(que a veces pienso) siento la presencia
del ñasco hambriento que alimenta
el estómago incorrupto del ser perfecto.

¡Yerra! ¡Yerra a todo momento!
¡Yerra! Que solo vives una vez
y nunca sabes si haces lo correcto.

Paulus M.

A todo aquel que se haya equivocado alguna vez.

Joan Manuel Serrat - Cantares

martes, 16 de diciembre de 2014

El pomo de Fleming




A 11 de Marzo de 1919

Edimburgo, Escocia.
Callejón del Hurto, Nº 3


Afectísimo Señor Ladrón:

Ruego me disculpe si le disturbo o le distraigo de sus labores de inventariado, pero el asunto que me empuja a escribirle esta misiva es de máxima urgencia.

Hace unos días usted sustrajo de mi propiedad un objeto de suma importancia para nuestros cotidianos devenires. Como habrá observado al realizar un (imagino común en su oficio) riguroso y exacto recuento de todos los artefactos y artilugios afanados, así como un peritaje adecuado para estimar sus diferentes valores, espero sea consciente de que uno de los posibles pomos que se encuentren en su haber, fue el que antes se encontraba anclado a las maderas de la puerta que sirve de entrada a mi consulta; por otro lado, la nueva América del descubrimiento médico, se lo aseguro.

Desde la desaparición del pomo de la puerta se dan situaciones extrañas. Dado que mi consulta es asediada de manera continua por afligidos enfermos, ahora estos pobres intratados, que padecen diarreas de múltiples variedades, tumefacciones renales, gota crónica, o moquillo mobilivirus, se encuentran en la situación de que les urge entrar, mas no tienen cómo. Dirá usted que una fácil solución es que llamen y se les abra desde dentro; o que incluso, si nuestra gentileza, hospitalidad y confianza con la sociedad fuese mayor de lo esperado y dejásemos el umbral abierto, no se encontrarían en la necesidad rigurosa de entrar puesto que ya estaría abierto y podrían hacerlo sin molestia ni esfuerzo; o que sencillamente podrían empujar otro lugar de la puerta, bien sea con la mano, el pie, u otros apéndices del cuerpo, y que aplicando la fuerza sobre la madera, y ésta a su vez ejercíéndola sobre el gozne, provocasen un movimiento de torque que abriese la puerta permitiendo el paso hacia el interior. Pero es que, muy señor mío, el ser humano es un ser de costumbres, de rutinas, y protocolos, y es imperiosa la tendencia que nos impulsa a mover la mano hacia un asidero.

Desde tiempos inmemoriales la humanidad ha usado instrumentos con sus manos por lo que, en su magnífica sapiencia natural, ha sabido acomodarse a su uso mediante la hergonomía, es decir, la ciencia de los asimientos. Empuñaduras, asas y mangos han acompañado siempre al artesano. Y como artesanos ejercemos al entablar relaciones con nuestros semejantes; somos artistas del lenguaje, la cortesía, y la empatía. Es por ello que el instrumento más básico y clave de la hospitalidad, la puerta, ha de ser el reflejo de aquel que nos la abre. Dado que en la actualidad mi puerta carece de pomo, es de obligado cumplimiento que me disculpe repetidas veces por esta grave fatalidad, por otra parte, fruto de su (convencido estoy de ello) bienintencionado volunto.

Es por todo ello que le solicito la devolución del pomo con toda la premura que le sea posible. Si por juego de azares esto le resultase en algún modo costoso, o perjuicioso, sepa que con gusto le gratificaré por cualquier daño, transporte, o montaje que la reposición suponga.

Agradeciendo la atención prestada a la presente y despidiéndome de Vd. con mi más distinguida consideración, creo oportuno mostrarle mis más sincera admiración por la maestría de su oficio.

Atentamente, Alexander Fleming.


Paulus M.


miércoles, 12 de noviembre de 2014

El vuelo de la mosca



Como la mosca que golpea la ventana buscando libertad
me doy de bruces con las leyes,
pues ni los presidentes ni los reyes
me abrirán a mi el cristal.

Mas si el enjambre de moscas se empecina
(¡Que vengan todas! ¡Las del baño y la cocina!)
y arremeten a la vez contra aquel que las enjaula,
por pura molestia, cojonera y testaruda,
abrirán el ventano para quitárselas de encima.

Pero nadie había advertido que la calle es dura y fría.
Que allí no hay water ni basura donde comer fresco cada día.
Que ser libre solo es bello si disfrutas la anarquía.

Todas ellas, a hurtadillas, volvieron a la casa.
Todas menos una que se quedó fuera "a ver que pasa".
Las cautivas, henchidas de placer,
aplanaban sus cabezas una y otra vez,
hasta que un diario gris, harto del zumbar,
llenó las sección de esquelas sin aviso al redactor.
Y la que quedó fuera, sin pena ni dolor,
aprendió de esta lección que mejor ser mosca libre,
que morir como el montón.

Paulus M.


Y bueno, estaba estudiando, había una mosca... y este es el resultado.

Nikolai Rimsky-Korsakov - El vuelo del moscardón.
Spotify || Grooveshark


Aquí interpretada por la Orquesta Filarmónica de Berlín

martes, 4 de noviembre de 2014

La Noche del Cazador


Cruje la madera bajo los temblorosos pies desnudos de un infante, escondido tras las sucias cortinas que cubren los viejos muebles de una polvorienta buhardilla. El niño aguanta como puede la respiración de sus jadeos y las caídas suicidas de unas lágrimas amargas que lo atragantan de terror. El sudor cubre su frente empapando unas cejas arqueadas y expectantes. Ha huido, desesperado, escaleras arriba desde el rellano, al oír cómo, desde el jardín, llamaban por su nombre. El chico, atolondrado por el miedo, se ha encerrado a sí mismo sin escapatoria en un ataúd destinado a contener antigüedades; extraños objetos del pasado que, como fantasmas, se aparecen horrorosos y balanceándose al ritmo de una voz que llama al pequeño, cada vez con más intensidad y menos paciencia.

La voz se mueve por la casa. Es dulce, apacible y confiada, pero no para el niño que escucha como si de los rugidos feroces de una bestia se tratase. La voz, que ya grita, grita y llama, se impacienta en la cocina y remueve las puertas bajo las encimeras, dando portazos tras la vana búsqueda. Abre los armarios y las perchas chirrían de lado a lado dejando hueco para colgar la angustia de la presa y el ansia del cazador. Los escalones sufren el peso de unos pasos que avanzan hacía arriba, acercándose al niño que tiene la cara y la manga cubierta de mocos y lágrimas, y que se acurruca en un rincón oscuro tras el vestido blanco de una novia que fue, alguna vez, una amante madre, pero que ahora se había convertido en su peor pesadilla.

Pálido del miedo, el pequeño pecho sube y baja diez mil veces por minuto; minutos que se hacen horas; segundos que se hacen días. Ya nunca más aquella mujer sería su proveedora de dulces y galletas, nunca más el cómodo vientre en el que la placenta le acogía, nunca más el pecho que de leche se vertía. De súbito, como apelando al aconejado corazón de aquel chiquillo, una suave nana de la infancia le llega a los oídos como el silbido de la flauta que atrae a los ratones. Duda si asomarse, duda si descubrir el rostro oculto tras la cola del vestido, duda si dejarse arrastrar a los brazos de su madre, pero puede el miedo y la parálisis que trae consigo. El blanco del vestido, que de la fuerte respiración del niño ha penetrado por la boca y la nariz, cubre su piel de marmórea palidez, camuflando y transluciendo un cuerpo puro y derretido de pavor, unos ojos de pupilas negras e infinitas y unos dientes que castañetean delatando el escondrijo.

La voz, que ha cesado, da firmes pasos bajo la buhardilla haciendo temblar el suelo y las paredes. El techo, de vigas añejas, deja caer una fina lluvia de brillante polvo que se posa suavemente en las figuras de las que el niño ha pasado a formar parte. Una trampilla que deja caer las escaleras y da acceso al desván (hasta entonces seguro recinto), se abre y por ella se cuela un suspiro ahogado que delata la presencia del muchacho. Por el hueco aparece una cabellera desmelenada y negra que se asoma. Unos penetrantes ojos negros otean la pequeña estancia en la que se cuelan fugaces rayos de luz haciendo de biombo al observador inexperto. Pero estos ojos, que no necesitan ver para mirar, y que encuentran a base de experiencia, no tardan en encontrar a la temblorosa figura que gime en el rincón.

La madre tiende la mano a su hijo y sonríe. El niño niega y llora. La paciencia se ha terminado. Entonces la madre, harta y hasta el colmo, agarra a su vástago por la patilla, tirando con fuerza y arrastrándolo escaleras abajo.

Todo ha terminado.

Se lo llevan al dentista.


Paulus M.




Un par de meses sin actualizar, pero nunca es tarde si la dicha es buena.

Hoy como recomendación musical, un himno religioso que acompaña la película "La Noche Del Cazador", film de 1955 protagonizado por Robert Mitchum.

"Leaning on the everlasting arms"



viernes, 22 de agosto de 2014

Reflexiones


Mentiría si dijese lo que escribo,
pues pensarlo no vale ya de nada.
Miles de momentos malgastados;
ya me duele el pecho de caladas.

Noches en vela de egoísmo
que no valen ni un suspiro, ni un atisbo
de tus sonrisas, las caricias, los amigos...

Promesas de difusas voluntades
que no hacen sino hacerte abandonarte.
Culpa ha la fantasía
que quiere valer por mil verdades.

Tú solo te condenas y encarcelas
en ventanas sin cortinas y sin rejas.
Sirenas del sistema que envilece
con veneno hasta las más simples tareas.

Letras, mensajeras de mis penas profundas:
desahogos que me perseguirán hasta la tumba;
que de mudo me desarmo y me desvivo
y por dentro la caldera hierve y zumba.

Letras, dadme el sueño que me falta
que de día tengo besos que me calman;
besos que no merezco, pero, en gracia,
me han llovido de agua grana,
pues amor, que es  uno y solo,
me acompaña.

Paulus M.


Tras un periodo vacacional, vuelvo al Traste a dar la vara. 
Voy a recomendaros dos películas que he tenido el gusto de ver en la Sede Bastarda.

"Walk the line" y "Ray", sobre las vidas de Johnny Cash y Ray Charles respectivamente, por lo tanto las recomendaciones musicales no podían ser otras que las siguientes:

Johnny Cash - Folsom Prison Blues


Ray Charles - I Got A Woman
Spotify || Grooveshark


domingo, 8 de junio de 2014

Nombre



Ding...

Cerraron las librerías para abrir comisarías, transformaron las bibliotecas en máquinas expendedoras de hipotecas, los teatros en gerencias del catastro, los museos exponen los retratos policiales de los reos, los auditorios quedan como purgatorios y las universidades como archivo y catálogo de todos los años y todas las edades.
Se afanaron con la cosecha del dato (a mayor cantidad, más maltrato) y se olvidaron del valor, de la cualidad, del dolor del amor; de la felicidad. Pensaban que podrían predecir el futuro, los peligros venideros, y así poner a salvo los céntimos, los euros... en fin, todos sus haberes y dineros.
¿Cómo se puede predecir algo que ni si quiera existe? ¿Se han planteado alguna vez decir “Oye, qué bueno que viniste”? ¿O es que tal vez nos hayamos ante una mafia de seres contables y tristes?
Ha caído en esta Tierra la maldición del ego y el nombre. Sufre el ser humano, sea mujer o sea hombre.
No, por favor, no se asombre.

...dong. Llaman al timbre.

-¿Fulanito De Tal?

-Presente.


Ya que no me lo publicaron en el concurso, lo publico aquí.

Bill Withers - Ain't no sunshine
Grooveshark || Spotify

sábado, 17 de mayo de 2014

Censu


Gracias al genial Quino por estas viñetas.



Jorge Sepúlveda - Mirando al mar.


miércoles, 30 de abril de 2014

La buena vida



Tenga usted un día estupendo:

Ante todo, para vivir bien primero definamos aquello que llamamos vida para entendernos a lo largo del siguiente discurso. Vida es todo aquello que pasa mientras esperamos a que todo aquello que pasa, pase de una vez. Al menos desde una perspectiva humana como tal, una perspectiva que entiende que puede haber algo más de lo que hay, que no se conforma con un conocimiento subjetivo de las cosas, que necesita del dato objetivo, y del análisis completo de las circunstancias en las que se encuentra para prever lo que sucederá próximamente, sin si quiera entender lo que sucede en el momento mismo del suceso. Es por ello que nadie en su sano juicio ha prestado atención a aquello que sucede, puesto que la creencia de que podemos conocerlo y controlarlo todo está tan arraigada, que el valor de las cosas pasa a un segundo plano. Sin embargo, resulta de suma importancia la cantidad y mesura de las mismas para, como vengo diciendo, a través de cálculos numéricos (insostenibles desde que el círculo no es nunca un círculo sino un huevo) hallar predicciones en las que preocuparnos mientras dejamos la vida pasar de largo.


sábado, 15 de marzo de 2014

Repulsa



Venceréis pero no convenceréis.
Perderemos y no convenceremos.
E inmersos en el Régimen, morimos
desalmados, desesperanzados, destruidos.

Que no caben sentimentalismos ya.
Que todo está mecanizado.
Hasta las ideas...
Hasta las no verdades.

Ya nadie hace nada por sí mismo,
todo ha quedado vendido al interés.
Muera el postureo inocuo y vano.
Aipotu es utopía del revés.

Y puestos a darle la vuelta
llamo a todos al interés,
al interés a largo plazo
del afecto desinteresado
de ser un poco, cada vez,
menos seres humanos.

No hay más verdad que la mentira
y la fea máscara del Sistema de la sátira
que nos escupe y se ríe en nuestra cara.
Cara de bobos. Cara de plata.

Esperpéntico Régimen de normas aleatorias.
Protocolos, etiquetas, no tienen goma sus caretas.
Ponencias de tacones y vestidos, camisas y banderas.
Para que uno venza también ha de haber derrota.
El respeto ya no importa, 
que me coman los cojones.
Que hacen del traje y la corbata 
señas de ser los campeones.
Lo del falo no les basta, 
banderas de punta el asta,
para atravesar corazones puros,
que nunca se demarcan.

Que muera el Ser en todas sus facetas.
Que muera el Estado y mueran sus instituciones
como, parece, han muerte mis fes y mis ilusiones.

Todos en su nicho esperan la ración.
-¿La razón?
-El racimo de sandeces:
políticas, sociales, económicas...
¡Memeces!

Tiene gracia la democracia disfrazada de fascismo.
Quizá hasta me encarcelen por decir esto mismo.
Ojalá el enojo de mis palabras provoque algún seísmo
y las masas se distraigan una semana más,
un segundo. Todo un ismo.

Ciudadanos y políticos ¡Qué diferenciación!
¡A la mierda la teoría!
¡A la mierda la masa 
y la conglomeración!
¡A la mierda el individuo!
¡A la mierda la civilización!

Paulus M.


Sex Pistols - Anarchy in the UK



Garrapatas Cojoneras - Día Positivo

(A falta de "Nubes Tóxicas" buenas son galletas)


martes, 4 de marzo de 2014

Trienio



Lo daría todo:
los viajes, las risas,
el ímpetu y mis prisas,
nuestros tres años de citas,
por volver a repetirlo.

Las caricias, los conciertos,
los fallos, los aciertos,
los futuros años inciertos,
el brillo de tus dos ojos abiertos.

Has aguantado, estoica,
mis bobadas y sandeces,
mi estúpida retórica,
mis vaivenes,
todas esas subidas y bajadas sin lógica.

Báculo para un joven anciano.
Oro para un pobre avaro.
Luz para un topo cegado.
Vida para un niño enterrado.

Que siga el juego.
Que jueguen los que siguen.
Que ni tú ni yo en otro tiempo
fuimos nunca tan felices.

Que si mañana volvemos a encontrarnos
no te asusten arrugas, o varices.
Yo estaré calvo; quizá tenga lombrices.

Que no es ni lo que yo digo
y tampoco lo que tú dices.
Que es lo que decimos sin palabras.
Basta solo con que mires.
Que eso se nota, se siente,
se palpa, se huele: se sabe.

Libre te quiero, como música:
tresillos de semifusas,
blancas largas, redondas,
también silencios, y anacrusas.

Que muera el hoy si tú no estás,
pues el ayer no significa,
y el futuro...
El futuro siempre estará por llegar.

Paulus M. a la Srta. Morricone.

Sting - Englishman in New York.

viernes, 21 de febrero de 2014

Grito sordo.



La autoridad se gana dando ejemplo
de cualquier tipo de buen comportamiento.
No soy yo quien debería decirlo en este momento
pero a ello me obliga el sufrimiento; no miento.

Cada vez se torna más fuerte la indiferencia.
Si no la controlo tal vez me lleve a la demencia
porque es de locos temer la ira de unos pocos:
la vesania incoherente de tolerar la intolerancia.

Ten cuidado, te aviso, Robespierre.
Tu reino del Terror llegará a su fin.
Tantas veces usaste la guillotina que
alguna vez de ellas se volverá contra ti.

No puedes encarcelarnos.
Eres tú quien está encarcelado con nosotros.
Puedes quitármelo todo,
y aún en mi mente soy más libre que tú
y que cualquiera de vosotros.

¿Tiene sentido un te quiero
cuando ya no te importa?
Corro y te arrastro conmigo
por mucho que la correa sea corta.

Choque de trenes frustrados
por no poder salirse de la vía.
Cuando descarrilen
la muerte les devolverá la vida.

Paulus M.

BSO Metal Gear 3 Snake Eater (Starry. K.) - Old Metal Gear.

miércoles, 22 de enero de 2014