lunes, 5 de marzo de 2012
Lo que es la vida...
Desde tiempos del "mitos" hasta la triste certeza del "logos", la humanidad ha tratado con mayor o menor suerte (todo depende del individuo) de responder a las preguntas esenciales que rondan no pocas cabezas en la faz de la polvorienta y agotada Tierra. La religión ha tratado, desde sus orígenes inmemoriales, adoctrinar y amansar al rebaño de fieles bajo una máscara, que pretendía ser la solución a todos los males, y la respuesta a las cuestiones. Apelaban a la fe, clamaban a la misericordia, llamaban a gritos a la bondad y pregonaban el amor entre hermanos así como la pobreza y la castidad; todo ello desde los balcones más suntuosos que puedan imaginarse, vestidos con los ropajes más ostentosos y fastuosos, desprendiendo lujo y vicio por todos los poros de sus sotanas, y portando el báculo del poder, el cayado que ha de seguir el paupérrimo vulgo con la esperanza de ver sus calamidades y miserias recompensadas en "la otra vida".
Pero ¿Hay si quiera otra vida? ¿Qué es la muerte? Ya, cuando la filosofía aún conservaba su esencia, Epicuro nos enseñó a desprendernos del temor a la muerte, pues cuando nosotros vivimos, ella aún no ha llegado; y cuando ella llega, nosotros ya no vivimos. Por lo tanto es un miedo inútil que no ha de importarnos en absoluto.
Mas vayamos ahora al otro extremo de nuestra existencia, nuestro nacimiento, y más atrás aún si cabe en el pasado, hasta el nacimiento de toda existencia. La única certeza que podemos tener en la vida es la que proviene de la ciencia, que demuestra empíricamente, de manera lógica y razonada, los sucesos por los que se rige el universo. Retrocedamos ahora al Big Bang. Toda la materia concentrada en un solo punto del infinito. La energía es inconcebible y se desprende en infinitas direcciones y de infinitos modos creando infinitas posibilidades de universos. Todas esas circunstancias existen al mismo tiempo en el infinito y están determinadas por la manera en que se crean, pero tú, como persona, apareces en una de ellas y solo en una. El lugar donde naces, la familia en la que naces, la casa en la que te crías, el colegio en el que aprendes, los amigos con los que juegas... Todo eso eres tú. Todas las circunstancias que te rodean te forman como persona y no tienes la más mínima posibilidad de cambiarlas. Naces condicionado y determinado, y aunque parezca que tienes libre albedrío, no estés tan seguro de ello, pues tu cerebro no eres tú. Tú eres una ilusión de éste. El ego crece a medida que forjas una personalidad y guía el modo en el que actúas a lo largo de toda tu vida.
¿Qué sentido tiene todo esto llamado "vida" entonces? El sentido está en que sí que hay libre albedrío, pero no de origen. Es algo así como "El pecado original" del que hablan los textos bíblicos. No nacemos con libertad de acción, pero es posible alcanzarla.
La vida es una mentira, y el teatro es la verdad.
En la vida solo eres tú y solo tú. En el teatro puedes ser cualquiera y quien quieras. Y ¿No había infinitas posibilidades al mismo tiempo? Entonces ¿Por qué quedarse solo con una, y únicamente con una (que además te viene dada) cuando puedes elegir esa condición entre infinitas posibilidades?
No se trata de actuar, sino de ser.
Paulus M.
Hoy os dejo con un genio de la guitarra. El magnífico B.B.King interpretando "The Thrill Is Gone"
(Spotify) (Grooveshark)
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