viernes, 23 de noviembre de 2012

La gravedad del Asunto



Aquel día, después de guardar el pan a congelar y de meter sus deliciosas croquetas de jamón en el tupper, se rebasó el límite y fue ya demasiado el peso y la masa de los hipotecados cimientos en los que se levantaba el hogar que acunó a sus hijos. Tan desmedida e ingente era la gravedad del asunto que, cuando salió al patio a tender la ropa, no pudo soportarlo más y la arrastró con ella.

Paulus M.

Microrrelato presentado a concurso; y no me canso de intentarlo.


Como hoy la parte escrita es "micro", vamos a hacer "macro" la parte musical de la entrada. Hoy: The Doors.

The End (Spotify) (Grooveshark)



Raiders on the storm (Spotify) (Grooveshark)

Soul Kitchen (Spotify) (Grooveshark)

lunes, 5 de noviembre de 2012

Descriptiva



De arriba a abajo: Siempre con capucha, como un duro casco de algodón contra las críticas y juicios que caían sobre su cabeza. Gafas de sol que filtraban sus prejuicios, haciéndole ver la realidad tal y como era, fuera ya de las cavernas. Una bufanda que le aclaraba la voz de tal manera que solo podía decir verdades. Su chupa de cuero le protegía, cual cota de malla, contra los puñales de la calle, contra las desazones de la raza humana, contra la pérdida de la esperanza, para lo que mantenía siempre su corazón caliente. Un colorido cinturón, evitaba las caídas estrafalarias de moral y las decaídas en el ánimo. Vaqueros raídos y ajados por los años y los pasos, le llevaban allá donde debía estar, en el preciso momento en el que debía aparecer. De lana gruesa los calcetines dispares que mantenían a salvo sus dedillos olorosos de las mordeduras de las ratas trepadoras, que vagan por la ciudad con traje y con corbata. Y por último, unas botas montañesas cuidaban sus pies de humedecerse en los charcos de lágrimas de la infinitud de personas que padecen éste mundo y ésta clase de vida.

Lo triste y contradictorio es que, a pesar de que él era feliz, el resto de la humanidad le tachaba de loco y paria abandonado; solo porque no tenía un puto duro.

¡Qué les zurzan! Allá vivan ellos con su doble moral hipócrita y cínica, hablando verdades falaces y estridentes, que rechinan en los oídos de cualquiera que escuche, que hace retumbar los cimientos de la pura lógica y de la razón. ¡Basta ya de tonterías! La vida es algo serio que hay que tomar a risa. Puro delirio es la medicina que necesitan. ¡Qué jueguen los niños! ¡Qué jueguen! ¿Y los no tan niños? ¡Qué jueguen también!

Cuanto mal hacen las expectativas. Castillos en el aire. Burlas de nuestra psique que desea lo que no puede alcanzar, en vez de disfrutar de lo que le viene dado. Ya se encargará la vida de proveer, pero hay que ver los guiños que nos hace, sino... perderemos nuestro turno y llegará esa hora maldita y temida que siega las almas del mundo. Y los que fueron tristes se alegrarán de que acabe su tristeza. Y los que fueron alegres son indiferentes ante ella, pues ya conocen lo que trae.



Paulus M.

Éste es un pequeño texto presentado a concurso. En principio el fallo del jurado es hoy. Editaré la entrada cuando conozca el resultado. 

No hubo suerte. Supongo que otra vez será, no por ello voy a rendirme.

La canción recomendada de hoy:

Django Reinhardt - Minor Swing  (Spotify) (Grooveshark)